Noticias / Misa de acción de gracias por la canonización de San José de Anchieta
La misa tuvo lugar en la iglesia de San Ignacio de Roma.
Esta Noticia fue editada el: 29-04-2014

Misa de acción de gracias por la canonización de San José de Anchieta max-width=

El día 24 de abril a las 18:00 horas, el Papa Francisco presidió la Eucaristía de acción de gracias por la canonización del jesuita español P. José Anchieta, SJ,que tuvo lugar en la iglesia de San Ignacio de Roma, y que se puede visualizar en: https://www.youtube.com/watch?v=nYHdL54vuBM

"La Iglesia no crece por proselitismo. Crece por la atracción testimonial"

El Papa Francisco, en su homilía, hizo referencia al Evangelio proclamado de San Lucas y comenzó apuntando que los sentimientos que surgen cuando los discípulos ven a Jesús resucitado son: miedo, sorpresa, duda y, por fin, alegría. “Por esta alegría no alcanzaban a creer, estaban atónitos y Jesús casi sonriendo les pide algo de comer y les explica las escrituras, despacio. Es el estupor del encuentro con Jesús donde tanta alegría nos parece mentira y aceptarla es arriesgado.” El Santo Padre añadió que ante este hecho suele surgir el escepticismo. “Damos excusas. No es para tanto, decimos, y caemos en el proceso de relativizar la fe, lo que nos aleja de la caricia de Jesús” -apuntó.

El obispo de Roma continuó señalando que el miedo nos lleva a querer controlar el encuentro con Jesús. “Los discípulos le tenían miedo a la alegría y nosotros también. La alegría del encuentro es contagiosa y grita el anuncio. Es ahí donde crece la Iglesia. La Iglesia no crece por proselitismo, sino por atracción, por el testimonio de la alegría asumida y luego transformada en anuncio. Lo que conocemos como la alegría fundante. Sin esta alegría no se puede fundar una comunidad cristina. Se trata de una alegría que se expande. Me pregunto como Pedro; ¿soy capaz de sentarme junto al hermano y contagiarle mi alegría?” –se preguntó retóricamente el Papa.

Tras esta reflexión, el Santo Padre expresó que San José de Anchieta sí que supo comunicar lo que había experimentado del Señor. Lo que había visto y oído. El Papa recordó que junto a Nóbrega, Anchieta fue el primer jesuita que Ignacio envíó a América. “Un chico de 19 de años –resaltó-. Y era tanto su gozo que fundó una nación. Puso los fundamentos culturales de una nación en Jesucristo. No había estudiado teología ni filosofía, era simplemente un chico. Pero había escuchado a Jesús. Se dejó alegrar y esa fue su luz”. El Santo Padre indicó que esa fe es la base de su santidad. “No le tuvo miedo a la alegría” –añadió.

Por último el Papa Francisco hizo referencia al hermoso himno que San José de Anchieta dedicó a la Virgen María. “Inspirándose en el cántico de Isaías 52 compara a la Virgen con el mensajero que proclama la paz y que anuncia el gozo de la Buena Noticia. Que ella, que en esa madrugada del domingo, insomne por la esperanza, no le tuvo miedo a la alegría, nos acompañe en nuestro peregrinar invitando a todos a  levantarse, a renunciar a la parálisis para entrar juntos en la paz y la alegría que Jesús resucitado nos regala.” –concluyó el Santo Padre.

ihs
Foto Angel