(La Nueva España)

San Miguel deja la gerencia del Hospital de Jove tras 21 años

El economista se jubila con la obra de ampliación para mejorar el área de consultas a punto de iniciarse

A. RUBIERA - Cumplidos 21 años en el puesto, y cuando el centro está a las puertas de iniciar un nuevo e importante proyecto de obras, el gerente del Hospital de Jove deja el cargo. El economista José Luis San Miguel Cela, 67 años, prepara en estas últimas semanas del año su salida por jubilación -prevista para la segunda semana de enero- del centro concertado gijonés, que ya se rubricó en la reunión oficial del Patronato. Atrás van a quedar dos décadas de trabajo ininterrumpido para la sanidad asturiana, aunque haya sido desde la óptica y los intereses de una Fundación privada sin ánimo de lucro como es el caso de Jove, que todo el trabajo que realiza lo lleva a cabo para el Servicio de Salud del Principado pero siempre ha querido diferenciarse de las dinámicas más perjudiciales de la sanidad púbica. Su puesto lo ocupará la hasta ahora directora de gestión dentro centro, Laura García Díaz.

San Miguel, que llegó a Jove en 1994 con la experiencia de haber sido gerente del Hospital General entre 1983-1987, ha cumplido con la pauta de la estabilidad que se buscaba para Jove. Sobre todo teniendo en cuenta el "milagro" que había supuesto convertir en un centro de referencia para la sanidad pública, con población asignada del área, lo que durante décadas había sido un hospital de beneficencia. El rumbo de esa estabilidad lo dejó marcado la antecesora de San Miguel, Zenaida Álvarez Bárcena, quien pasó 25 años en Jove, catorce de ellos como administradora general, y también dejó el cargo por jubilación. En la búsqueda de sustituto confió en San Miguel Cela, que tras su paso por el Hospital General había asumido la dirección del Instituto de Fomento Regional (IFR) y la presidencia de la Oficina Regional de Promoción.

En dos décadas de gestión José Luis San Miguel ha trabajado para consolidar el prestigio como hospital básico para la zona oeste de Gijón -también para el concejo de Carreño- y para mantener a Jove como un pilar del área sanitaria V, pese a tratarse de un centro concertado que siempre ha tenido que buscar su encaje y su supervivencia sin hacer demasiada sombra al Hospital de Cabueñes.

Un centro que, además, ha sufrido a veces con rigor las tensiones internas derivadas de estar a medio camino entre la sanidad pública y la privada. Esas tensiones, sobre todo las referidas a las relaciones con la plantilla, son las que más factura han pasado al propio San Miguel en estos años.

La implantación del servicio de Radioterapia o la inversión permanente en el centro adelantándose a las necesidades del área para no perder el paso ante el Sespa, son algunos de los logros que acumula José Luis San Miguel. Con su marcha, y las sucesivas en los últimos años de algunos de los jefes de servicio con más carisma y mayor conocimiento de los orígenes del Hospital de Jove -cuando de un hospital de beneficencia se logró su encaje en el sistema público- , el centro concertado tiene otro horizonte. Por lo pronto en lo inmediato está una inversión de unos 8 millones de euros para ampliar el complejo sanitario de Jove en beneficio de la atención en consultas. Ayer el centro recibía la licencia para iniciar las obras, que se espera que cojan ritmo a principios de enero.