Noticias / Fallece Emilio Botín (p.1951), presidente del Grupo Santander
Esta Noticia fue editada el: 10-09-2014

Fallece Emilio Botín (p.1951), presidente del Grupo Santander max-width=

(EL PAIS)

Muere Emilio Botín

La entidad ha comunicado la muerte del banquero a la CNMV

Emilio Botín, presidente del Banco Santander, ha fallecido esta noche en Madrid a los 79 años de edad a causa de un ataque al corazón. El Banco Santander ha enviado una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores en la que informa: "Banco Santander lamenta comunicar el fallecimiento de su presidente, Emilio Botín".

"De acuerdo con lo previsto en el artículo 24 del Consejo durante el día de hoy se reunirá la comisión de nombramientos y retribuciones y el consejo de administración para designar al nuevo presidente del banco", añade el comunicado. La nota está fechada en Boadilla del Monte (Madrid) hoy y ha sido difundida a las 8.45.

Emilio Botín, nacido en Santander en 1934, era bisnieto, nieto, sobrino, hijo, hermano y padre de banqueros. Entró en la entidad cuando tenía 24 años, en 1958, y no ha dejado de trabajar desde entonces. Bajo su dirección, convirtió a la entidad en el mayor banco de la zona euro por capitalización bursátil con una política muy expansiva. Compró Banesto, absorbió al Central Hispano y, fuera de España, se hizo con el estadounidense Sovereign Bank, entre otras entidades de renombre en Latinoamérica.

Botín tenía previsto en su agenda acudir de este miércoles a la presentación en la Ciudad Financiera del Santander de un cuadro de Velázquez, La Educación de la Virgen, restaurado con los fondos del banco.

Botín estaba casado con Paloma O´Shea, nombrada marquesa de O´Shea en 2008 por el rey Juan Carlos I. Tenía seis hijos: Ana Patricia, Carmen, Emilio, Carolina, Paloma y Francisco Javier.

 

(EL MUNDO)

Muere Emilio Botín

El presidente del Banco Santander Emilio Botín ha fallecido a los 79 años de edad. La entidad lo ha comunicado en un breve hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

Nación el 1 de octubre de 1934 en Santander. Fue bisnieto, nieto, sobrino, hijo, hermano y padre de banqueros.

Ingresó en el Banco Santander en 1958, desempeñando varios cargos. Seis años más tarde fue nombrado director general y en 1986 presidente, sucediendo a su padre. La entidad es hoy el primer banco del país con una capitalización bursátil superior a los 90.000 millones de euros.

A lo largo del día se reunirá la comisión de nombramiento y el consejo de administración de la entidad para designar un nuevo presidente del banco.

 

(LA NUEVA ESPAÑA)

Fallece a los 79 años Emilio Botín

Nacido el 1 de octubre de 1934, ha fallecido a causa de un ataque al corazón - Heredero de la tradición financiera de su familia, comenzó a dirigir Banco Santander en 1986 y fue artífice de la expansión internacional del banco

El presidente del Grupo Santander, Emilio Botín, falleció anoche a los 79 años, según ha comunicado la entidad financiera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). "Banco Santander lamenta comunicar el fallecimiento de su presidente, Emilio Botín", ha comunicado la entidad. Fuentes del Santander han explicado que el fallecimiento ha sido causado por un ataque al corazón.

En un comunicado, el Santander indica que durante el día de hoy se reunirán la comisión de nombramientos y retribuciones y el consejo de administración para designar al nuevo presidente del Banco.

Nacido el 1 de octubre de 1934 en Santander, Botín fue heredero de la tradición financiera de su familia, ya que su abuelo y su padre fueron presidentes del Banco Santander, y comenzó a dirigir esta entidad bancaria en 1986 de cuya expansión internacional fue artífice.

 

(EL COMERCIO)

Muere a los 79 años Emilio Botín

El presidente del Banco Santander ha fallecido esta mañana, según ha confirmado la entidad en una nota remitida a la CNMV

El Banco Santander ha comunicado a la CNMV el fallecimiento de Emilio Botín, presidente de la entidad.

"Banco Santander lamenta comunicar el fallecimiento de su Presidente Emilio Botín" señala el hecho relevante enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

"De acuerdo con lo previsto en el artículo 24 del reglamento del consejo, durante el día de hoy se reunirán la comisión de nombramientos y retribuciones y el consejo de administración para designar al nuevo presidente del Banco", añade la nota.

 

(La Nueva España)

Botín, sin blanca en los Jesuitas de Gijón

El banquero fallecido ayer estudió interno, junto con su hermano Jaime, en el colegio de la Inmaculada, sin privilegios y sin apenas dinero de bolsillo

J. MORÁN Un automóvil de porte señorial y con chófer -datos extraños para la España de los años cuarenta del pasado siglo- dejaba cada comienzo de curso a dos adolescentes santanderinos a las puertas del colegio de la Inmaculada de Gijón, regido por los Jesuitas. Eran los hermanos Emilio y Jaime Botín-Sanz de Sautuola y García de los Ríos, hijos, nietos y bisnietos de banqueros, así como futuros magnates de las finanzas.

Cada curso, Emilio Botín, nacido en 1934 y fallecido ayer, y Jaime, dos años menor, dejaban la limusina familiar y se convertían en meros alumnos de un internado de Jesuitas. Hasta entonces, una institutriz les había administrado educación en su mansión de El Sardinero, pero su padre, Emilio Botín, había decidido mezclar a sus hijos con el mundo. Fue por consejo de una tía de los dos chavales, residente en Gijón y casada con el ginecólogo Rodríguez de Castro, por lo que el patriarca Botín eligió la Inmaculada, que además era el internado más próximo a Santander.

El viejo Botín, que había sido alumno de los Jesuitas en Carrión de los Condes (Palencia), visitaba a sus hijos una vez por trimestre. Alto, con sombrero de hongo y ayudado por un bastón, supervisaba que sus vástagos recibieran una educación de hierro, pero sin privilegio alguno entre el resto de los internos. De hecho, apenas les daba dinero de bolsillo para que así experimentaran en su plenitud la austeridad jesuítica de un internado. Ambos muchachos se integraron bien con sus compañeros y, principalmente, en las actividades deportivas. Aunque la alopecia identificaría con el tiempo la imagen de Emilio Botín, durante su adolescencia una enorme mata de pelo contribuyó a que fuera un vigoroso interior derecho que destacaba en el juego de cabeza en los equipos de fútbol tutelados por el padre Hermida. Su hermano Jaime, en cambio, de mayor estatura, se dedicó al baloncesto.

Del paso de los Botín por la Inmaculada de Gijón quedan varios testigos. Compañeros suyos fueron el catedrático Mariano Abad, Juan Campos Ansó, exsenador del Partido Popular; Manuel Vega-Arango, expresidente del Sporting, o Manolo Galé, presidente de la Federación Asturiana de Tenis. Y el jesuita Gumersindo Treceño, que hoy suma 101 años, fue su profesor de Francés. Otro vestigio de los Botín en el antiguo cuartel del Simancas es el obsequio que su padre dejó como agradecimiento a la formación recibida por sus hijos: un sagrario que hoy continúa en el templo colegial, encargado a los talleres Granda de arte religioso.

Emilio Botín finalizó el Bachillerato en la promoción de 1951, un año antes que su hermano. Después, continuó su formación universitaria en Derecho por Valladolid y en Económicas por Deusto, también de los Jesuitas. En 1958 ingresó en el Banco de Santander y en 1986 sucedió a su padre como presidente.

 

(EL COMERCIO)

De los jesuitas a la cúspide de las finanzas

La vinculación al Principado se ahondó con las amistades surgidas en la juventud, como Gonzalo Álvarez Arrojo o la familia Masaveu
Emilio Botín y su hermano Jaime completaron el bachiller en el colegio de la Inmaculada de Gijón

OCTAVIO VILLA.Los grandes personajes viven siempre por encima de las fronteras del resto de los mortales. A finales de los años cuarenta, cuando Santander estaba aún a casi un día de viaje por carreteras que ahora son, en el mejor de los casos, comarcales, el padre de Emilio Botín, el también banquero Emilio Botín-Sanz de Sautuola López decidió enviar a sus hijos Emilio y Jaime a estudiar en el internado del Colegio de la Inmaculada, de Gijón. La decisión de aquel banquero, entonces al frente de una entidad de tamaño moderado, pudo verse influida por los ejercicios espirituales y formativos que los jesuitas celebraban anualmente en Pedreña, al igual que por el prestigio que el propio centro tenía en Asturias y sus provincias limítrofes.

En el colegio gijonés acabaron los jóvenes Botín de cursar los siete años del Bachillerato, algo que por aquel entonces no estaba al alcance de la mayoría, y compartieron pupitre con insignes gijoneses tales como Fernando Urrutia, Alberto del Campo, Juan Campos Ansó, Agustín Carril, Luis Riera, Antonio Martínez García o Fernando Allende, entre otros. Mariano Abad recuerda de ellos que "eran muy deportistas, y Jaime era especialmente brillante como estudiante. Llegó a hacer dos cursos en un solo año". Por su parte, Senén Guillermo Molleda Valdés, que además de compartir colegio con ambos también estuvo en la Universidad de Deusto cuando Emilio Botín cursaba Economía allí, anotó que "ambos eran muy llanos y normales. Emilio era más deportista, y Jaime era un dibujante excepcional".

Cuenta Molleda que Emilio Botín padre se acercaba a Gijón "casi todos los fines de semana para sacar a los dos hermanos a comer", mientras que Mariano Abad subraya que el agradecimiento del progenitor al colegio se plasmó "en el regalo del retablo del altar de la iglesia".

En Deusto, Emilio, "siempre muy santanderino", recuerda Molleda, ejerció también de gijonés, al menos como excolegial del Inmaculada. Sin embargo, ni ese orgullo jesuita, que le llevó, por ejemplo, a que sus hijos estudiasen en el colegio madrileño de la orden, El Recuerdo, le permitió ceder en uno de sus principios: No recibir premios personales, sino sólo para el Grupo Santander. Y es que la Asociación de Antiguos Alumnos del Inmaculada le propuso en varias ocasiones recibir el título de alumno distinguido, algo que declinó con elegancia. La última vez, al actual presidente, Antonio Pellico, que ayer expresó el pésame de la asociación.

Formación y contactos

 Si Gijón marcó a los Botín en su etapa de bachilleres, su padre mantuvo el criterio de excelencia en su formación universitaria. Emilio completó Derecho en Valladolid y Economicas en Deusto. Como estudiante conoció al quien sería con los años otro destacado empresario asturiano, Gonzalo Álvarez Arrojo, fundador de la compañía de transportes Arrojo y actual máximo accionista de Duro Felguera, a quien siempre le unió una estrecha amistad. Lo mismo que a Elías Masaveu y a su familia. La confianza entre los Botín y los Masaveu tuvo su traslación no solo al plano personal, sino también en la forma de una toma de posiciones accionariales, tras su salida del Banco Herrero, en el Banco Santander y en Bankinter (entidad que Jaime Botín presidió entre 1986 y marzo de 2002 y de la que seguía siendo el máximo accionista, con un 23,87% de los títulos).

El cariño de Emilio Botín por la familia Masaveu fue evidente en su presencia en Oviedo, con motivo del funeral de Elías Masaveu, en mayo de 2005. No fue una simple visita de cortesía, sino que el banquero mostró a José, Fernando y Luis, los hijos de Elías Masaveu, todo su respaldo y calor humano.

Entre las muchas absorciones que, de la mano de Emilio Botín, acometió del Grupo Santander se encuentra la de Banesto, entidad en la que buena parte de las grandes fortunas familiares asturianas contaban con importantes participaciones.

Fundación, universidad y F-1

Con la rápida expansión del Banco Santander, también crecieron los beneficios. Sea como una estrategia de promoción de la imagen del grupo, sea por convencimiento de su responsabilidad social, o por ambos motivos, Botín dio luz verde a importantes incrementos de las labores sociales del banco. Así, durante el año pasado destinó 142 millones de euros a proyectos y convenios de colaboración con 1.136 universidades de 20 países, entre ellas, la de Oviedo. Precisamente, la última visita oficial de Emilio Botín a Asturias tuvo lugar el pasado 20 de junio, para firmar con el rector de la Universidad asturiana, Vicente Gotor, la renovación de su compromiso con el Campus de Excelencia.

También formaba parte Emilio Botín del Patronato Príncipe de Asturias, muy vinculado a la Fundación Príncipe, presidida por su íntimo amigo y vicepresidente segundo del Santander, Matías Rodríguez Inciarte.

Otra actividad promocional, la deportiva, vincula también al banquero al Principado, siquiera sea de forma circunstancial, al apoyar decisivamente con su patrocinio al equipo Ferrari de Fórmula Uno la llegada del asturiano Fernando Alonso a la scuderia.

Foto Angel