Noticias / La prensa recoge el fallecimiento del jesuita Pedro Niño
Impulsó en los años 70 el proyecto "Gijón una ciudad para todos".
Esta Noticia fue editada el: 18-10-2020

La prensa recoge el fallecimiento del jesuita Pedro Niño max-width=

(El Comercio)

Fallece en Quito el jesuita Pedro Niño, impulsor del proyecto "Gijón una ciudad para todos"

Tenía 89 años y padecía una larga enfermedad. En Latinoamérica desarrolló programas educativos con jóvenes

GUILLERMO MAESE. GIJÓN. - Considerado uno de los misioneros asturianos de referencia, el jesuita Pedro Niño falleció el pasado jueves a los 89 años al no superar una larga enfermedad en Quito, Ecuador. Allí vivía desde hace más de cuarenta años. Sus últimas labores humanitarias en España las desarrolló en Gijón. En el Hogar de San José comenzó su carrera y allí consiguió que otros muchos jóvenes misioneros de la Compañía de Jesús le acompañarán en su labor humanitaria y educativa. En El Natahoyo implementó cursos de aula abierta como corte y confección, electricidad y ortografía, entre otros.

«Fueron jesuitas que venían con una labor educativa por delante muy saludable para una ciudad necesitada de profesionales. Se dedicaron a formar jóvenes a los que ellos venían a suministrar conocimientos y educación», asegura el gijonés Hernán Piniella Iglesias.

En los años 70, el chabolismo en Gijón era un problema acuciante. Fue en aquellos años cuando el jesuita alumbró la idea de intentar erradicarlo. Nació entonces la iniciativa "Gijón una ciudad para todos", que buscaba educar a los chabolistas para comenzar un movimiento social que ayudará a conseguir una vivienda digna. En este proyecto, su mayor obsesión fue hacer partícipe a todos los ciudadanos posibles. Una tarea de mejora colectiva para ampliar fronteras físicas y mentales. «Inició en los años setenta un asedio a la pobreza que logró a través del esfuerzo solidario y la educación que muchas personas vivieran un poco mejor», recuerda Piniella.

Cuando se erradicó el chabolismo en Gijón, a principios de los 80, Pedro Niño ya había emigrado a Latinoamérica con una nueva misión humanitaria. Allí, durante 40 años, se dedicó a impulsar el programa educativo "Irfeyal", que en la actualidad está presente en quince provincias de Ecuador, y cuenta con alrededor de 8 000 estudiantes. Su misión también se trasladó a la comunicación. Fue también fue fundador de la Asociación latinoamericana de Educación Radiofónica (Aler) y de la Coordinadora de Medios Comunitarios Educativos del Ecuador (Corape). Sus restos mortales fueron sepultados en una capilla colegial en Quito.

Foto Angel